24/11/09

2020 AC-DC #5

2020 AC 2020 DC
Zihjt se fue a buscar al jefe del clan. Le rindió cuenta de lo que había observado y le mostró la pequeña espina.
- "Hoofd, la única cosa que parece haber herido a Adhir es esta pequeña espina. ¿Algo tan pequeño puede producir la muerte?"
- "¡Debemos preguntarle al chamán!"
Éste miró la espina y se rascó la cabeza.
- "Es una aguja de pino, pero afilada y untada con algo que podría ser un veneno. Nunca había visto ésto. Este color blanco no puede ser de la espina: fue colodo por alguién. Proviene quizás de una planta que mata. Porque como hay plantas que curan, las hay que pueden matar. Les sugiero atrapar vivo a algún animal en la próxima caza y pincharlo con esta aguja. Sabremos entonces si fue lo que mató a Adhir."

El chamán le estaba devolviendo el dardo a Zihjt cuando unos niños pasaron corriendo detrás de él y lo atropellaron, lo que hizo que pinchara a su interlocutor en la mano. Zihjt retiró la mano por reflejo y la miró. Iba a decir algo, pero las palabras se le atragantaron. Su vista se enturbió y sintió que su cuerpo se paralizaba. Sus pulmones de bloquearon y perdió el conocimiento, cayendo al suelo. Su corazón dejó de latir.

Dagent hizo entonces una copia de los códigos anormales y la instaló en otro computador para tratar de reprodcir lo que había ocurrido realmente. Por seguridad y para documentar su investigación, puso en marcha la cámara de alta definición sincronizada con la nueva pantalla, que filmaría ésta al mismo tiempo que lo vigilaría a él mismo. Luego lanzó el software pirata reconstituído. Los últimos parámetros de flujos de CC-5 aparecieron para luego dejar lugar a una imagen: un vampiro que batía las alas y un mensaje que decía "Juege conmigo: 1=Sí 2=No". En su otra pantalla, Dagent vió que Danloy había marcado varias veces el 2. Hizo lo mismo. Cada vez volvía la misma imagen y el mismo mensaje. La otra pantalla mostraba que Danloy había probado todas las formas de escape posibles. Los reprodujo también, uno por uno. Luego apareció una imagen rotativa que lo hipnotizó rapidamente. Hubo una ráfaga de relampagos que lo cegaron y perdió el conocimiento. La secuencia de códigos externos había llegado a su fin.




Zihjt había caído y no se levantaba. El chamán lo examinó pero sabía ya que el pequeño dardo acababa de matarlo del mismo modo que Adhir. Pero era inconcebible que Adhir se hubiese pinchado él mismo. Por otra parte, como lo había explicado Hoofd, las huellas examinadas por Zihjt no llegaban hasta el lugar donde se había desplomado, a una decena de pasos de la cueva y a una centenar del bosque. Y el chamán no conocía ningún instrumento capaz de lanzar agujas a tal distancia. ¿Entonces: de dónde había llegado el dardo y cómo?











Fue Edward Weinbraith, el adjunto de Dagent, que encontró a éste una hora más tarde, cuando vino a informarle de su inspección en los otros departamentos de la empresa. Avisó de inmediato al gerente del nuevo fallecimiento y éste llamó otra vez al comisario Trompel. Mientras esperaba a éste, ordenó a Weinbraith de retirar la memoria de la cámara especial que había instalado Dagent y lso dos la miraron en otra máquina. Dagent había comentado en voz alta todo lo que había hecho, lo cual les permitió seguir paso a paso el desarrollo de su investigación y de ver la secuencia hipnotizante y la ráfaga de relámpagos sin ser afectados por éstos por cuanto ocupan solo una parte de la pantalla.

Cuando llegó Trompel, después de mostrarle la oficina de Dagent y el cadáver, le mostraron la grabación, explicándole los aspectos técnicos de los comentarios de Dagent. Todos estuvieron de acuerdo en concluir que los relámpagos debían ser la causa, directa o indirecta, de la muerte de Dagent y Danloy. El informe del médico legista que había examinado el primero y que Trompel recibió unas horas más tarde venía confirmar esta hipótesis.

17/11/09

2020 AC-DC #4

2020 AC2020 DC

Como las últimas nieves se habían derretido pocos días antes y que había llovido al inicio de la noche, el terreno donde se terminaba la roca del acantilado estaba aún fangoso. Zihjt recorrió un centernar de metros en el borde inferior del acantilado, delante de la cueva. Había huellas de los movimientos de la tribu el día anterior, pero ya eran a penas visibles, borradas por la lluvia. Sin embargo, también había huellas frescas que se dirigían hacia el riachuelo, lejos del camino que el clan utilizaba habitualmente para ir a recoger su principal bebida. Iban en la dirección de otro contrafuerte rocoso, donde sabía que el Clan del Ciervo tenía su cueva. Eran numerosas y calculó que cuatro hombres debían haber pasado por ahí, en los dos sentidos, sin duda después del término de la lluvia nocturna y antes del amanecer. Solo podían ser los asesinos, qui debían haber caminado después dentro del agua, ya que no había huella más allá. ¿El clan del Ciervo habría hecho una incursión durante la noche? ¿Pero por qué? ¿Y por qué Adhir se había levantado y había salido? ¿Por qué nadie lo sintió? ¿A qué hora ocurrió? Su cuerpo estaba frío y rígido. Calculó que, por lo tanto, había pasado al menos la quinta parte de la noche desde su muerte.













Dagent conectó su computador al sistema de supervisión de la actividad de los controladores y llamó la secuencia de CC-5 desde las 4.30 de la mañana. En su pantalla, una columna mostraba los parámetros que habían sido grabados minuto a minuto y otra la actividad del operador. A las 4 con 48 minutos, el canal V18 había cído por debejo de los parámetros normales y el operador había verificado que uno de sus servidores había fallado, pero el servidor de respaldo se había puesto inmediatamente en marcha. Por lo tanto, no tuvo que intervenir manualmente. A las cinco exactamente, cosas totalmente anormales empezaron a aparecer en la pantalla: líneas de código, numerosas, que no correspondían a nada esperable, en la primera columna. Y en la de respuesta del operador respuestas sí-no acompañadas de movimientos y clics del ratón. Al cabo de quatro minutos todo volvió a la normalidad en la primera columna y la segundo quedó vacía.

La primera conclusión era, por lo tanto, que había habido una intrusión en el sistema de control. ¿Pero de donde provendría? El sistema de control de flujos era uno de los mejor protegidos, en el seno de una empresa donde las normas y procedimientos de seguridad eran ya de los más elevados del planeta. Dagent pasó al registro de control de acceso al sistema de vigilancia de flujos. Todas las entradas eran las de los operadores cuando se habían hecho cargo de su turno, a los once de la noche anterior. Excepto una. Había una entrada a las cinco de la mañana, pero su identificación había sido borrada. Ésto significaba que un hacker había podía traspasar el corta-fuego, introducir un "virus" y luego borrar su entrada. Debía ser muy experto para lograr esta hazaña.

Zihjt volvió a examinar las huellas de pasos fuera de la cueva. Parecía un grupo de personas, pero había algo extraño. Comparó las huellas que iban en la misma dirección y descubrió la anomalía: eran exactamente las mismas, en las dos direcciones: debían ser de un solo hombre que quizo hacer creer que había pasado un grupo. De lo contrario, debería haber diferencias en la forma de las huellas. ·Ésta es una treta inteligente" pensó. "¿Pero por qué?" ¡Otra pregunta más!

Examinó de nuevo el río y lo siguió por varios centenares de metros: no salía de él ninguna huella y, en realidad, no lo esperaba. Estaba persuadido ahora de que todo había ocurrido entre el río y la cueva. ¿Habría un asesino en el clan? ¿Y conocería una nueva arma?

Como el procedimiento normal solo podía mostrar los códigos transmitidos y no el estado de la pantalla del operador, Dagent pensó que quizás no fuese lo que Dagent había visto. Una primera forma de verificarlo sería de ver sincrónicamente las imágenes tomadas por la cámara de vigilancia. Las llamó por lo tanto en otra pantalla e hizo partir los dos registros cinco minutos antes de las cinco. La cámara mostró efectivamente una variación anormal de los colores de la pantalla que estaba observando Danloy, como si hubiese mirado fotos o televisión, durante los cinco minutos fatídicos.





10/11/09

2020 AC-DC #3

2020 AC 2020 DC

Zihjt fue a examinar el muerto. Como no observó ninguna herida, postpuso un examen más a fondo y consideró más urgente estudiar el trayecto que había seguido Adhir. Esperaba poder determinar si había salido porque se sentía mal y si alguién lo acompañaba. Volvió así a examinar la salida de la cueva y la zona del fuego. Encendió su propia antorcha para ver mejor el recorrido que el muerto debió efectuar desde su estera hasta la salida, examinando el suelo con cuidado. Había varias huellas, pero difíciles de apreciar porque había poco polvo en el suelo de piedra y varias personas ya habían hecho el mismo trayecto. Y como todo el clan empezaba sus actividades, mientras más avanzaba, más huellas se mezclaban donde eran visibles. Así, no pudo observar nada anormal. ¿Por qué había salido Adhir antes de la hora habitual? ¿Y de qué había muerto?























Dagent aseguró la entrada a los policías y se quedó a distancia mientras observaban el muerto y el técnico hacía lo necesario para encontrar huellas digitales y otras posibles pistas físicas. Las pantallas estaban apagadas: no servirían de nada a la policía, que debían recurrir a los propios técnicos de Ethercom cuando los delitos informáticos en la red eran demasiado complicados.

Las únicas huellas que encontraron en el teclado y la pantalla principal eran las del mismo Danloy y un dedo de Lapit. El resto estaba limpio. Y como el sistema acondicionado filtraba el polvo y que los empleados de esta zona vivían en el complejo, no había huella de pasos. Si alguién hubiese venido del exterior -y franqueado los controles-, podría haber dejado alguna huella, pero no era el caso. Haría falta la autopsia para determinar la causa de muerte de Danloy. Por ahora, parecía una muerte natural. Después de la toma de fotos de rigor, Trompel llamó a los camilleros, que se llevaron el cuerpo a la morgue.

- ¿Tiene alguna idea de la hora de muerte de este hombre? -preguntó el inspcetor-. Estoy seguro de que puede saber facilmente a qué hora dejó de trabajar.
- Tenemos en efecto un registro de actividades en otra máquina. También tengo en este momento a un experto analizando los videos de seguridad de esta lugar y de los entornos. Si me acompaña a mi oficina, puedo llamarlo para que nos informe.
- Vayamos allá.

Una vez llegados, Dagent llamó al encargado de revisar los videos. Éste confirmó que nadie había entrado en CC-5 antes de la llegada de Lapit. Y Danloy parecía haber tenido un episodio de hiperactividad durante cinco minutos a partir de las cinco de la mañana; luego había quedado totalmente inmóvil. Ésta debía ser, por lo tanto, la hora de su deceso o, en todo caso, de lo que lo había provocado. ¿Era la consecuencia de ese período de hiperactividad? ¡habría que analizar los registros de seguimiento de las operaciones de CC-5 a esa hora.
Zihjt volvió a examinar Adhir con mayor cuidado. Ya sabía que no había ninguna herida a la vista. También sabía que el hombre tenía buena salud, al menos hasta el día anterior. Poco antes lo había acompañado en la última caza y no había demostrado cansancio alguno. Era aún joven y vigoroso. Revisándolo encontró clavada en su cuello una pequeña aguja de pino. La sacó con cuidado y vió que tenía una punta extremadamente afilada y de color blanco, mientras el resto tenía color verde. La guardó en un pedazo de piel curtida y siguió explorando el cuerpo. Pero no encontró nada más.







El médico legista inició la tarea de la autopsia con sumo cuidado et muchas dudas: no encontró ningún signo externo que pudiese ayudarlo. El sujeto era un hombre joven, de unos treinta años, y claramente en buena forma física. Sin duda hacía regularmente deporte, lo cual podría sin duda ser confirmado por la empresa. El estudio de los órganos internos le confirmó esta opinión: estaban todos perfectamente sanos, excepto quizás el cortex visual, donde el microscopio le hizo surgir algunas dudas. Con la mayor ampliación, pudo ver que el estado de las neuronas era tal que el hombre debió estar ciego en el momento de su muerte. Realizó un análisis químico, pero éste no reveló nada anormal. Era al nivel del citoesqueleto de las células (su envoltura) que se había producido un cambio increíble: se había solidificado y no podía dejar pasar el flujo normal de iones. Nunca había visto ésto en un cadáver ni en la literatura médica. Llamó por teléfono al mejor neurólogo que conocía, el cual le confirmó que era un caso absolutamente excepcional. ¿Cómo saber lo que había provocado este cambio?

Decidió congelar el cerebro y los ojos de la víctima, para conservarlos lo mejor posible para una investigación futura. Luego redactó su informe y lo envió al inspector Trompel.

3/11/09

2020 AC-DC #2

2020 AC 2020 DC
Como no podía hacer nada por él, el deber de Erham era avisar enseguida el jefe del clan. Regresó al interior de la cueva y se dirigió al rincón más alejado, donde el jefe tenía su estera. Éste acababa de despertar, y lo puso al tanto.
- ¿Quién es? -preguntó. 
- Es Adhir.
- ¿Y qué hacía afuera?
- No tengo idea. Era mi turno de reactivar el fuego. Dormí cerca y no lo oí salir.

- Vuelve a la entrada. No dejes que nadie se acerque, para no borrar indicios. A la pasada, llámame el heraldo: le diré de avisar a todos de lo que deben hacer. Y voy a pedir una reunión del Concejo de Sabios para nombrar un investigador y preparar el entierro.

Como no podía hacer nada por el muerto, el deber de Lapit era, ante todo, de asegurar la red.
Reactivó la pantalla y verificó los parámetros de todos los canales: eran felizmente normales para el período que podía visualizar. Pero haría falta una investigación más exhaustiva remontando en el tiempo hasta el momento en que su colega había perdido el control. Manteniendo un ojo sobre la pantalla, según las normas, dictó el código de alerta que activó el teléfono.
- Central de alertas -respondió una voz, en el parlante de la sala-. ¿Cuál es la emergencia?
- Al entrar aquí, acabo de encontrar muerto al operador de noche de la celda de control CC-5. Los parámetros actuales de los flujos están OK. Echen a andar los procedimientos que correspondan.
- Avisamos a Seguridad. Evite tocar lo que sea. Pasamos en control de flujos de CC-5 a CC-15. Puede ir allá para hacer su trabajo.
- De acuerdo. Solo toqué la tecla de reactivación de la pantalla. Ahora me voy.

El Concejo, formado de cinco ancianos, todos de entre 28 y 30 años por cuanto pocos eran los que sobrepasaban esa edad, se reunió de inmediato y decidió en cargar a Zihjt la investigación de lo ocurrido. Se consideraba a Zihjt como el mejor seguidor de pistas del clan.El servicio de seguridad bloqueó de inmediato el acceso a CC-5 excepto para sus propios hombres. En un caso tan grave, debían necesariamente avisar a la policía pero había hartas otras tareas que solo investigadores internos podrían realizar: analizar los sumarios electrónicos de las actividades internas y de la red que podían estar vinculadas a CC-5 y a Danloy, revisar los videos de seguridad de las salas y pasillos, etc. Así, el análisis interno se encargó al ingeniero Maurice Dagent. Una hora después, éste acompañaba al inspector Joseph Trompel y al técnico en huellas de la Policía Juidical a la celda 5.